sábado, 28 de octubre de 2023

FLORENCIA (2):CAMPANILLE Y BAPTISTERIO

 2. Campanile de Giotto

Acompañando al edificio de la catedral está el campanario, anexo, pero no adosado, y destinado exclusivamente a disponer en él las campanas y de esta forma evitar los daños por vibraciones en el edificio de la iglesia.
La construcción del campanario fue un proceso complejo y costoso. La ciudad de Florencia necesitó conseguir financiación de donantes privados y empresas locales para completar la construcción. Giotto también tuvo que idear una serie de innovaciones, ya que era importante mantener medidas precisas para garantizar el equilibrio y la simetría de la torre. Para construir la torre con las especificaciones correctas, empleó una combinación de andamios, polipastos y medidas precisas para transportar los materiales hasta los niveles superiores de la torre.
Está considerado uno de los más bellos de Italia gracias a su armonioso colorido y sus cuidadas proporciones. Y está considerado desde 1982 como Patrimonio de la Humanidad.
Interior de los primeros pisos
Sus cimientos fueron excavados hacia 1298, al inicio de la construcción de la nueva catedral, cuando el maestro de obras era Arnolfo di Cambio. Arnolfo necesitaba liberar espacio para la construcción de la cúpula -que preveía que sería enorme-, por eso la zona que dejó para el campanario fue alineada al frente de la catedral y no en la parte posterior como es habitual.
En 1334 Giotto di Bondone asumió el cargo de maestro de obras, encargándose inmediatamente de la construcción del primer piso del campanario (la base) y sin interesarse - según la leyenda - por las obras de construcción de la basílica.
Fachada

El proyecto inicial del gran Giotto preveía una altura entorno a los 110/115 metros con una cima piramidal de aproximadamente 30 metros de altura. Su pronta muerte en el año 1337 le impidió terminar su obra y por eso el proyecto tal como él se lo había imaginado no se llevó a cabo. No obstante, como reconocimiento a su trabajo, el campanario lleva su nombre.
Tras su muerte la obra fue continuada, no sin problemas estructurales, sobre todo los relacionados con el mantenimiento del equilibrio por el enorme peso que tenía que soportar, por Andrea Pisano que, siguiendo, sólo en parte, el diseño original, terminó los dos primeros pisos y modificó el exterior con la adición de dos pilastras en cada cara, con el objetivo de subsanar la disminución de espesor de los muros que Giotto había recortado en casi medio metro debido al hueco y el problema del equilibrio. 
La modificación estructural funcionó muy bien, ya que el campanario pudo alcanzar los 85 metros previstos sin mayores problemas, pero l
os inconvenientes seguían siendo la estrechez del espacio en la base del campanario y la irregularidad de las ventanas.
En la parte construida bajo su dirección, el campanario tiene una serie de nichos ojivales para un ciclo de esculturas de bulto redondo que se ve mejor que los bajorrelieves de los pisos inferiores 

Pisano fallece, en la epidemia de peste del 1348 y la obra es completada finalmente, años más tarde, en 1359, por Francesco Talenti, quien le daría la forma actual definitiva, resolviendo el problema de equilibrio del edificio con pilastras que permitían grandes aberturas en altura.
La terraza de la azotea y el punto más alto al que se puede llegar fue en realidad una idea de Talenti.
Cerramiento superior con
terraza
Sus líneas rectas con 84´70 metros de altura y su base cuadrangular de 14´45 m. por 14´45 metros, contrastan con las curvaturas de la cúpula de Brunelleschi. De estilo gótico, construido con mármol y ladrillos, está distribuido por niveles.
Una base distribuida en dos subniveles, superpuestos y profusamente decorados. En el primer registro, más bajo, con siete medallones hexagonales en cada una de las caras que representan la Creación del Hombre, las Obras Humanas y las Artes, con la caída original y la redención por el trabajo con las prácticas económicas y artísticas, y en un segundo registro, más elevado, esta vez en forma de rombos o diamantes donde se representan,  la influencia de los Planetas sobre la vida del hombre, las virtudes de éste: teologales y cardinales. También se reflejan las Artes Liberales: Trivium y Quadrivium  y los Santos Sacramentos. Todo el programa figurativo representa las dos esferas de la vida humana: una más mundana y otra más espiritual en ese intento de visión renacentista del hombre como unión de cuerpo y alma.
Hexágonos con bajorrelieves
Los bajorelieves hexagonales abajo y en diamante en el nivel superior son difíciles de atribuir ya sea a Andrea Pisano, Luca della Robbia o Giotto.
Os pongo un cuadro con la distribución de los temas tratados en la decoración del campanille.

Cara oeste

Cara sur

Cara este

Cara norte

Paneles Hexagonales de la Base (NIVEL INFERIOR)

1.° la Creación del hombre;

2.° la Creación de la mujer;

3.° la Ley del trabajo;

4.° la Vida pastoral;

5.° la Música;

6.° la Metalurgia;

7.° la Invención del vino.

8.° la Astronomía;

9.° la Arquitectura;

10.° el Arte del alfarero;

11.° el Arte de entrenar caballos;

12.° el Arte del tejedor;

13.° la Promulgación de las leyes;

14.° la Exploración de nuevas regiones.

15.° la Navegación

16.° la Justicia social;

17.° la Agricultura;

18.° el Comercio;

19.° la Geometría

la Escultura

 la Pintura

Elio Donato o  Prisciano  (gramática)

Platón y Aristóteles (retórica y dialéctica o filosofía)

Arión de Lesbos o Orfeo (música)

Euclides y Pitágoras (geometría y aritmética)

Ptolomeo (astronomía))

Diamantes del nivel superior

Los siete astros: Luna, Mercurio, Venus, Sol, Marte, Júpiter, Saturno.

Las Virtudes teologalesFe EsperanzaCaridad

Las Virtudes cardinalesPrudenciaJusticiaTemplanzaFuerza

Las Artes del discurso: Gramática, Dialéctica, Retórica

Las Artes del Quadrivium: Aritmética, Música, Geometría y Astronomía.

Los siete sacramentos : Bautismo, Confesión, Casamiento, Ordenación, Confirmación, Eucaristía, Extrema Unción

Estatuas en los nichos con arcos

Sibila de Tibur (Pisano)

David (Pisano)

Salomón (Pisano)

Sibila de Eritrea (Pisano)

Profeta Moisés (Pisano)

Profeta (Pisano)

Profeta (Pisano)

Profeta (Pisano)

Profeta barbudo (Donatello)

Profeta 

El Sacrificio de Isaac por Abraham (Donatello)

Profeta, llamado el pensador (Donatello)

Profeta

Habacuc (Donatello, retratando a Giovanni Chiericini, un enemigo de los Medicis)

Jeremias (Donatello, retratando a Francesco Soderini, un enemigo de los Medicis)

Abdias
(las cuatro añadida entre 1420-1435)

Esculturas
Bajorrelieve de
Prisciano o la Gramática
Un segundo nivel donde encontramos 16 estatuas, cuatro en cada una de sus caras, en sus respectivas hornacinas o nichos, se trata de profetas y sibilas, de tamaño natural, que son el trabajo de varios artistas del siglo XIV, incluidos el propio Andrea Pisano y Donatello entre otros.
Por encima y en este mismo nivel encontramos una línea con cuatro nichos simulados, a semejanza de los anteriores, pero tapados y vacíos.
Los tres últimos niveles con ventanas geminadas con columnas góticas curvas con mainel o ajimez, en cada una de las caras de los dos primeros y trigeminadas en el tercer nivel o superior. Según suben los niveles, éstos tienen los vanos más anchos para descargar peso sobre la estructura.
Por fin y tras 441 escalones llegamos al piso superior donde encontramos las siete campanas y la terraza o plataforma de observación con vistas panorámicas de Florencia y la cima que termina en un falso arco.
La mayor de las campanas se llama Santa Ana, en honor a la santa a la que estaba dedicada la iglesia original. Las otras son conocidas como Misericordia, Apostólica, Assunta, Mater Dei, Annunziata e Immacolata. Todos estos nombres están relacionados de alguna manera con la Santísima Madre y la dedicación de la iglesia nombrada: la Catedral de Santa María del Fiore. 
Los cinco niveles están embellecidos con un refinadísimo revestimiento de mármoles polícromos como los de la catedral y el Baptisterio, esto es,  de mármol blanco (procedente de las canteras de Campiglia Marittima y Pietrasanta), verde (serpentina de Prato) y rojo (Monsummano Terme, Siena) y rosa  (Maremma) y sobre todo ese grandioso ciclo figurativo que adorna la base del campanario y que vincula la obra de Giotto con las de las esculturas de las portadas de las catedrales románicas y góticas
Interior pisos superiores
Curiosamente, en el revestimiento de mármol de la última planta se utilizaron losas de mármol blanco con motivos de incrustaciones de estilo románico, quizás fueran piezas reutilizadas de la obra del Baptisterio.
Los bajo relieves y las esculturas son copias de las cuales sus originales se conservan en el Museo dell'Opera del Duomo.
Cuentan las malas lenguas que durante la fase inicial en la que el campanario fue cubierto y decorado con valiosos mármoles blancos, rosas y verdes así como con esculturas realizadas por los mejores artistas de la época, un ciudadano de Verona,de visita en la ciudad y  comprendiendo perfectamente el valor que estaba asumiendo la obra, dijo que la República Florentina no podía permitirse el lujo de seguir financiando la totalidad de esa obra. 
Este juicio, al parecer,  tan  superficial y sin importancia ofendió tanto a la Signoria que  infligió dos meses de prisión al imprudente Veronés por desacato.
Parte superior
Una vez cumplida su condena, el abanderado Ruggeri Calcagni, al ordenar su liberación, quiso, sin embargo, que le llevaran a ver la opulencia del tesoro público, antes de concederle la liberación, para hacerle consciente de la solvencia real de los florentinos que, no sólo pudieron permitirse el lujo de realizar la rica cobertura de su campanario, sino que podían cubrir de esta manera toda la ciudad.
La torre es significativa en la historia de la arquitectura gótica italiana porque supuso un cambio respecto a los tradicionales campanarios redondeados que dominaban el paisaje arquitectónico de la época. El innovador diseño de Giotto estableció una nueva norma para los campanarios e inspiró a innumerables arquitectos y artistas.
Os acompaño las estatuas que podemos ver en lascuatro caras de la fachada:


Estatuas de la cara Norte
Estatuas de la cara Sur


Estatuas de la cara Este




Estatuas de la cara Oeste




3.- Baptisterio de San Juan

El Baptisterio de San Juan (Battistero di San Giovanni) es un edificio religioso bajo la advocación de san Juan Bautista, que es el patrón de la ciudad de Florencia.
Se encuentra en la "Piazza del Duomo", plaza dedicada al santo y al oeste y enfrente de la fachada principal de la catedral (Duomo) de Santa María del Fiore. Aunque, al parecer, en origen se levantara en la zona noroeste de la primera cerca medieval de la ciudad.
Se incluye en la categoría de basílicas menores.
Es particularmente famoso por sus tres conjuntos de puertas de bronce, de considerable valor artístico.
Hasta 1935 todos los florentinos fueron bautizados en el Baptisterio ya que las otras iglesias de la ciudad no tenían derecho a la pila bautismal.
Durante mucho tiempo, hasta el Cinquecento, se afirmaba que el baptisterio era originariamente un templo romano dedicado al dios Marte, el dios tutelar de la vieja Florencia y al que en la Edad Media se le había añadido el ábside y la linterna, Pero, esta conjetura  se abandonó a fines del siglo XIX,  cuando tras unas excavaciones, en sus cimientos se encontraron restos de edificaciones de casas romanas fechadas en el siglo I d.C. Cerca del altar se puede ver una rejilla en el piso, con algunos vestigios de la antigua «domus» romana sobre la cual se construyó el Baptisterio.
Hoy en día la teoría más aceptada, por sus características arquitectónicas, es que su origen sería una construcción paleocristiana con sucesivas intervenciones durante la Baja Edad Media, hasta dar con una configuración parecida a la actual.
Últimamente ha vuelto a tomar fuerza la teoría del origen romano del baptisterio, pero no como sucesor de un templo a Marte, sino con una teoría mucho más elaborada por la que se afirma que su origen sería un templo conmemorativo romano, pero de la victoria de Estilicón, generalísimo romano, tutor de los hijos del emperador Teodosio y de origen vándalo,  contra Radagaiso, jefe de los godos ostrogodos en el año 406, cuando intentó asolar Florencia.
Acontecimiento que San Agustín tomó como argumento para demostrar el poder del cristianismo contra el paganismo, y de ahí que aunque el edificio tenía un origen civil terminara consagrado para uso cristiano, como ocurrió con numerosos edificios.
De todas formas, se sabe con certeza que un primer baptisterio octogonal fue construido aquí en el siglo IV o V de nuestra era y que posteriormente fue reemplazado por otro baptisterio en el siglo VI.
Existe un escrito datado en el 897, donde se dice que el emperador  impartía justicia desde el porche frente a la iglesia de San Juan Bautista; al hablar de iglesia, esto da pie a conjeturar que en ese momento todavía no ejercía funciones de baptisterio. Durante ese tiempo, el baptisterio se encontraba rodeado por un cementerio con sarcófagos romanos, utilizados como tumbas por importantes familias florentinas, (ahora en el Museo dell'Opera del Duomo).

Fue la segunda basílica de la ciudad después de la de San Lorenzo, fuera de las murallas de la ciudad, y precedió a la iglesia de Santa Reparata,
También hay otro documento datado en 1057. Se trata de un documento de consagración por el Papa Nicolás II, en el que también aparecen referencias a algún tipo de obra de restauración y ampliación sobre un edificio de estilo románico y de estructura octogonal.
La construcción se finalizó en el año 1128. Y el edificio se convierte oficialmente en baptisterio y a mitad de ese siglo XII todo el exterior, que originariamente era de piedra arenisca, fue placado en mármoles blancos de Carrara y verdes de Prato con un diseño geométrico.  Una lámpara octogonal fue añadida al techo del pabellón alrededor de 1150. Fue ampliada con un ábside rectangular, en el lado oeste en el año 1202.para después continuar enlosando el interior y el suelo, fechado en 1209. Probablemente, las pilastras de granito fueron tomadas del foro romano en Florencia. Otros mármoles fueron sacados de antiguas edificaciones. Según la leyenda, los mármoles llegaron desde Fiesole, que había sido conquistada por Florencia en 1078.
En las esquinas, bajo el techo, hay unas monstruosas cabezas de león con cabezas humanas bajo sus garras. Son tempranas representaciones de marzocco, el león del heraldo florentino
Aunque hay autores que fechan la cúpula en la segunda mitad del siglo XII no hay documento que lo corrobore. Los mosaicos del ábside se cree que se realizaron en 1220 y los de la cúpula se hicieron entre 1270 y 1300.
Pila bautismal

Como en esa época, entre los siglos XIV y XVI, el sacramento del bautismo sólo era aplicado dos veces al año, fue necesario abrir tres puertas dobles de bronce, con estatuas de mármol y bronce sobre ellas para permitir el acceso de la multitud de fieles en una ciudad que ya contaba con más de treinta mil habitantes.
Con ello queda claro que el edificio que los florentinos tenían en más alta estima será el baptisterio, por encima de la mismísima catedral.
El baptisterio también fue lugar de investidura de caballeros y poetas y también era la sede de celebraciones en honor a San Juan, patrón de la ciudad, el 24 de junio.
En 1576, con motivo del bautismo del heredero del gran ducado Francesco I de Medici, el arquitecto Bernardo Buontalenti sustituyó el baño bautismal por inversión medieval por una fuente.
Exterior
El baptisterio tiene planta octogonal, esto es, ocho lados iguales  y de la que sólo sobresale un ábside rectangular orientado hacia el oeste, con tres puertas orientadas hacia el oeste, norte y sur y gran cúpula de ocho segmentos y más de 25 metros de diámetro.
Esta forma octogonal, forma propia de las pilas bautismales bizantinas y medievales, simboliza los "ocho días" (en latín: octava dies). Este es el tiempo para la Resurrección de Cristo y la Eternidad en el cristianismo. Era considerado un símbolo para la vida eterna, privilegio dado a través del bautismo, cuando uno pasa de la vida del pecado a la vida de Cristo.
Sus ocho fachadas, originalmente de arenisca, están decoradas con mármoles blancos de Carrara modelados geométricamente y verdes de Prato embutido y modelados en estilo románico,
Su diseño está dispuesto en grupos de tres, comenzando con tres secciones o cuerpos horizontales, el primero organizado con pilastras corintias en cada esquina, originalmente de piedra gris, que fueron decoradas con mármol blanco y negro en un diseño de cebra realizado por Arnolfo di Cambio, el segundo con tres grandes arcos ciegos de medio punto por cada lado apoyados sobre semicolumnas poligonales también corintias, y en los que se alternan vanos de medio punto con otros rectangulares con frontones triangulares, una esquema que después fue muy imitado en el Renacimiento, y un tercero con pilastras acanaladas en sus extremos del mismo orden, sobre el que se apoya la cubierta y con pequeñas ventanas en la parte inferior de los paneles centrales.
El exterior también se encuentra ornamentado con una cierta cantidad de estatuas sobre las Puertas del Paraíso o sobre las puertas sur, los originales los encuentran en el Museo de la Opera de Florencia, por motivos de conservación. Ya que en diferentes períodos históricos de Florencia, estuvieron en peligro, como en la inundación del 1966, que causó grandes daños en toda la ciudad.Las estatuas de bronce de la puerta norte representan a "Juan Bautista rezándole a un fariseo y a un saduceo". Fueron esculpidos por Franceso Rustici  que pudo haber sido ayudado en su diseño por Leonardo da Vinci, quien lo asistió en la elección de sus herramientas.
Las Puertas del Paraíso están coronadas por un grupo de estatuas (hoy en día copia) retratando a El Bautismo de Cristo por Andrea Sansovino. Los originales se encuentran en el museo Opera del Duomo. Sansovino partió a Roma dejando las estatuas inconclusas y el trabajo se continuó mucho después por Vincenzo Dante en 1571, un escultor de la escuela de Miguel Ángel. Al momento de su muerte en 1576, el grupo estaba prácticamente finalizado, siendo finalizado con el agregado de un ángel creado por Innocenzo Spinazzi en 1792.
Símbolo del Arte de Calimala
El conjunto de la fachada sur se completa con un grupo escultórico sobre su puerta realizado por Vicenzo Danti en 1571 con Salomé, el Bautista y el verdugo en el momento de la ejecución. Fue restaurado en 2008 y desde entonces se conserva en el Museo dell'Opera del Duomo, sustituido en el baptisterio por una copia.
La decoración exterior estuvo financiada por el “Arte de Calimala”, el gremio más importante de la ciudad medieval, representado por los importadores textiles.
El ábside fue originalmente semicircular, pero fue sustituido por la actual scarsella (especie de sacristía) rectangular en 1202.
El estilo de esta iglesia serviría como patrón en el diseño de iglesias de estilo románico en la Toscana.
El edificio cuenta con tres accesos flanqueados por columnas de fuste liso y capiteles compuestos con tres puertas de bronce que se realizaron siguiendo un único programa iconográfico que buscó reflejar la Historia de la Humanidad y la Redención, como si de una Biblia se tratara. Su orden narrativo comienza con las historias del Antiguo Testamento en la puerta este, la última en incorporarse, la Vida de San Juan Bautista en la puerta sur, la primera, y la Vida de Cristo en la norte.
Fueron realizadas por el encargo de una comisión de los comerciantes florentinos, que deseaban dar al Baptisterio la importancia que se merecía. Cada una realizada por famosos artistas florentino.
La Puerta Sur realizada por Andrea Pisano
La Puerta Sur es la más antigua. En 1329 y recomendado por Giotto se le adjudica la tarea de diseñar el primer conjunto de puertas a Andrea Pisano, que la deja firmada en la parte superior con una inscripción en la que se lee: "Andreas Ugolini Nini de Pisis me fecit A.D. MCCCXXX", (lo cual significa: Andrea Pisano me construyó en 1330).
Las Puertas sur fueron instaladas originalmente en el lado este, mirando hacia el Duomo, para ser posteriormente llevadas a su posición actual en 1452 para dejar paso a las puertas de Lorenzo Ghiberti con decoraciones más elaboradas.
Escenas en la puerta sur (Andrea Pisano) 1. El ángel se anuncia con Zacarías. 2. Zacarías se queda mudo 3. Visitación4. Nacimiento del Bautista. 5. Zacarías escribe el nombre del chico. 6. San Juan de niño en el desierto. 7. Le reza a los fariseos. 8. Anuncia a Cristo. 9. Bautismo de sus discípulos. 10. Bautismo de Jesús. 11. San Juan reprime a Herodes. 12. Encarnación de San Juan. 13. Los discípulos visitan a San Juan. 14. Los discípulos visitan a Jesús. 15. Baile de Salomé. 16. Decapitación de San Juan. 17. Presentación de la cabeza de San Juan a Herodes. 18. Salomé presenta la cabeza a Herodías 19. Transporte del cuerpo de San Juan. 20. Entierro. A. Esperanza B. Fe C. Caridad D. Humildad E. Fortaleza F. Templanza G. Justicia H. Prudencia
Es una puerta realizada con oro y bronce, de unas 8 toneladas en la que la forja de los bastidores fue realizada en Venecia  y se tardó por lo menos seis años, las puertas fueron completadas en 1336. Estas puertas del prerrenacimiento consisten en 28 paneles cuadrados de dimensiones 577 × 428 cm., y dispuestos en filas de cuatro  con relieves muy bien encuadrados en un marco gótico, los 20 paneles superiores representan escenas de la vida de San Juan Bautista (El ángel se anuncia con Zacarías, Nacimiento del Bautista, Bautismo de sus discípulos, Bautismo de Jesús…). Mientras los ocho paneles inferiores retratan las virtudes teologales y cardinales (esperanza, fe, caridad, humildad, fortaleza, templanza, justicia, y prudencia). Todos ellos con figuras realistas con estilo sobrio y refinado.
Puerta de Pisano
Los relieves moldeados con decoraciones más elaboradas fueron añadidos por Lorenzo Ghiberti en 1452.
El grupo de estatuas de bronce sobre la puerta representa, como ya he dicho con anterioridad,  La decapitación de San Juan Bautista Fue restaurado en 2008 y desde entonces se conserva en el Museo dell'Opera del Duomo, sustituido en el baptisterio por una copia.

Los marcos de bronce fueron elaborados por el hijo de Lorenzo, Vittorio.
Pisano se separó de la elegancia un poco afectada de la época gótica tardía con un trabajo extremadamente simple, evitando las prendas de vestir adornadas y las poses exageradas, adoptando gestos y expresiones simples. Él quería que sus composiciones destacaran por detalles insignificantes.
La puerta norte realizada por Lorenzo Ghiberti
En 1401, se anunció un concurso por parte el Arte di Calimala, patrón del baptisterio, para diseñar las Puertas norte del baptisterio. Siete escultores compitieron, incluyendo entre ellos a Lorenzo Ghiberti, a Filippo Brunelleschi, o a Donatello ganando la competencia Ghiberti, de 21 años. Brunelleschi estuvo tan desilusionado por este resultado que partió a Roma para estudiar arquitectura y nunca más volvió a esculpir.
Escenas en la puerta norte (Lorenzo Ghiberti): 1. Anunciamiento. 2. Navidad. 3. Adoración de los magos. 4. Disputa con los doctores. 5. Bautismo de Cristo. 6. La tentación de Cristo 7. Atrapando a los mercaderes del Templo. 8. Jesús caminando sobre el agua y salvando a Pedro. 9. Transfiguración. 10. Resurrección del Lázaro. 11. Entrada de Jesús en Jerusalén. 12. La Última Cena. 13. Agonía en el Huerto. 14. Cristo capturado. 15. Flagelación. 16. Jesús ante Pilatos. 17. Ascenso a la Caballería. 18. Crucificción. 19. Resurrección. 20. Pentecostés. A. San Juan Evangelista. B. San Mateo C. San Lucas D. San Marcos E. San Ambrosio F. San Jerónimo. San Gregorio H. San Agustín
Al parecer la idea original era dedicarlas al Antiguo Testamento, de ahí que se eligiera como motivo de selección “El sacrificio de Isaac”, pero después de la resolución se decidió que el motivo central fuera “La vida de Cristo”. Los diseños originales de El sacrificio de Isaac, tanto de Ghiberti  como de Brunelleschi se encuentran exhibidos en el museo de Bargello.
Se pretendía que fueran a juego con la Puerta de Andrea Pisano, en la portada sur, de ahí, que presente una estructura similar.
A Ghiberti le tomó 21 años completarlas, entre los años 1403  y 1424, hay que tener en cuenta que compaginó este encargo con otros trabajos.
Estas puertas realizadas con bronce dorado y con una dimensión de 506 x 387 cm están dedicadas a la Vida de Cristo, al igual que las del sur estaban dedicadas a la Vida de San Juan Bautista, consisten en una superficie rectangular limitada por columnas de fuste liso y capiteles compuestos, que soportan un sencillo entablamento y están organizadas en 28 paneles, con 20 paneles superiores representando escenas bíblicas del Nuevo Testamento (Anunciamiento, Navidad, Adoración de los Magos, Bautismo de Cristo, la Última Cena…). Y los 8 paneles inferiores muestran a los cuatro evangelistas, San Juan, San Marcos, San Mateo y San Lucas y los doctores de la iglesia San Ambrosio, San Jerónimo, San Gregorio, y San Agustín.
Los paneles y las jambas están decorados con un marco gótico de hojas, ramas de hiedra y frutos salpicados con insectos, crustáceos, anfibios y reptiles que se considera que podrían tener una función mágica contra las plagas en los cultivos para evitar las hambrunas.
Encontramos en las esquinas de los marcos unos mini-bustos dorados con cabezas de profetas y sibilas en la intersección de los paneles. Una de ellas, la de la esquina superior izquierda de la escena de la Natividad, quinto panel, es el autorretrato del artista,  usando un curioso sombrero.  Además, en la parte superior de esta escena continuando en la de la Epifanía hay una inscripción en la que se lee: “OPVS LAUREN / TII FLOREN TINI”.
Para leer correctamente la iconografía de estas puertas es preciso situarnos en un punto inicial que será la escena de la Anunciación, sita en la parte izquierda de la quinta fila, empezando por arriba. A partir de ahí iremos de izquierda a derecha y de abajo arriba hasta completar los veinte paneles: Anunciación, Natividad, Epifanía, Disputa entre los doctores, Bautismo, Tentación en el desierto, Expulsión de los mercaderes del Templo, Jesús camina sobre las aguas, Transfiguración. Resurrección de Lázaro, Entrada en Jerusalén, Última Cena, Oración en el Huerto, Prendimiento, Flagelación, Cristo ante Pilatos, Subida al Calvario, Crucifixión, Resurrección y Pentecostés.
Escena de la Anunciación
Ghiberti se sirvió de diferentes fuentes para elaborar las escenas y siguió en la elaboración de ellas la propia cronología histórica de la narración de los acontecimientos. Esto, de alguna forma, explica que las escenas más bajas muestren características propias del gótico, mientras que las más altas muestren un incipiente lenguaje renacentista y aunque todavía denotan una adaptación al marco, característica propia de gótico, sin embargo  las escenas superiores muestran una cierta perspectiva y dominio espacial, con composiciones más realistas ambientadas mediante arquitecturas, presencia de animales, plantas y objetos. También aparece personajes bien diferenciados unos de otros y en definitiva crean un aire de realidad que es propia del Renacimiento.
Sacrificio Isaac de Ghiberti
Esto se comprueba fácilmente en la escena de la Anunciación, que fue la primera en ejecutarse, la acción se desarrolla sobre una repisa, con ausencia de fondo, no hay referencias espaciales y los elementos aparecen sueltos. El pórtico que contiene la figura de María, está desproporcionado, no se utiliza todavía las leyes de la perspectiva. En otros casos Ghiberti utiliza los lóbulos y las puntas del marco para adaptarse a las figuras, pero en ocasiones esta adaptación resulta muy forzada.
Ghiberti también acostumbra a reunir en un solo panel dos  escenas distintas como ocurre en La Natividad y el  Anuncio a los pastores, no existe el espacio donde se desarrollan las acciones, y todos los personajes tienen la misma importancia.
Pero a medida que vamos ascendiendo observaremos un mayor naturalismo paisajístico, como en la Epifanía donde ya se muestra una estructura arquitectónica sobre unas rocas, con una cierta búsqueda de la perspectiva, San José está detrás de la estructura en la que apoya su cabeza y a la que coge con la mano y los personajes aparecen en distintas actitudes y se abigarran unos tras otros dando gran importancia a los pliegues de los ropajes.
Sacrificio Isaac de
 Brunelleschi

O en el bautismo de Cristo donde la vegetación ambienta la escena. Corren las aguas del río y las figuras no están rígidas, incluso la figura de Cristo adquiere un cierto tinte clasicista con esa curva praxiteliana.
Hay un momento en el que Ghiberti nos muestra el gran dominio que ha adquirido en la técnica de fundición del bronce, son las alas membranosas del demonio y los ropajes de los personajes en el panel de Las Tentaciones de Cristo.
Poco a poco las composiciones van ganando en naturalismo, hay que observar los rostros de pánico en los apóstoles en el panel de Jesucristo caminando sobre las aguas o la ambientación y el rico paisaje de la Oración en el huerto.
Tentaciones de Cristo
Para contribuir a ese dramatismo real que vivió Jesucristo, en la parte alta, coloca los momentos más crudos de la Pasión.
Sobre la puerta hay un grupo escultórico en bronce representando a San Juan Bautista predicando entre el levita y el fariseo de Francesco Rustici, aunque según Vasari, Leonardo da Vinci fue responsable del diseño de este grupo de tres personas, incluso le ayudó Brunelleschi en la elección de las herramientas a utilizar. Hoy en día el original está en el Museo dell’Opera del Duomo.
Y sobre la ventana central está el emblema del Arte di Calimala, un águila con un fardo de mercancías entre sus garras.
Todas las representaciones de bronce están realizadas con la técnica de la cera perdida lo que supone un hándicap, por cuanto la técnica todavía no estaba muy desarrollada, y al utilizar moldes de arcilla el resultado era bastante áspero.
La técnica de la cera perdida consiste en elabora un modelo provisional de cera, reproduciendo las figuras esquematizadas en los bocetos con mayor detalle debido a su textura y modelarlos con facilidad Partiendo de ese modelo elaborado en cera, este se forra con un material que sea maleable pero que resista la acción del fuego sin alterarse, generalmente escayola o arcilla.
Oración en el huerto
Después de  crear el molde, se le añaden los «bebederos», canales por los que pueda salir la cera fundida, se introduce invertido en el horno y al vaciarse de cera, por el calor, quedará el hueco para ser rellenado por bronce líquido que ocupará el lugar de la cera.
Una vez enfriado el bronce, se procede al desmoldado, destruyendo el bloque del material resistente al fuego. En este momento, nuestra figura tendrá un aspecto áspero, poroso y con imperfecciones, además de los restos de los bebederos, que serán cortados y limados posteriormente.
Finalmente, la figura se pule y abrillanta, procediendo a patinarla (darle color) y montarla en tu escultura o el lugar donde vaya inserta.
Juan Bautista entre el
levita y el fariseo
Por ello, Ghiberti, que era muy meticuloso y detallista, se vio obligado a tener que repasar todo lo realizado con cincel.
El 24 de abril de 1424, tras una labor de dorado de las escenas y montaje de las piezas, la puerta quedó instalada en el lado este, frente a la fachada principal del Duomo, aunque la siguiente puerta del artista, la conocida como Puertas del Paraíso, tuvo tanto éxito que desplazó a ésta, que terminó ubicada en portada norte.
Las puertas del baptisterio son una copia de las originales y actualmente se utiliza como entrada. Las originales han sido  recientemente restauradas, recuperando su dorado original y que se encuentra en el Museo dell’Opera del Duomo.
La puerta este, Puerta del Paraíso realizada por Ghiberti
A partir de la ejecución de la puerta norte, con las representaciones de la Vida de Cristo, la celebridad de Ghiberti alcanza cimas insospechadas, considerándosele el artista más importante de Florencia y por ello recibió el encargo para realizar otras puertas para el Baptisterio, en 1425, justo un año después de haber terminado las primeras y donde él y su taller trabajaron durante 27 años. Pero, ya no fue por concurso sino por adjudicación directa del Arte de Calimala, patrón del edificio. Se le concedió licencia para que la puerta resultara adornada y rica sin límite de gastos, resultado absolutamente asombrosa gracias al uso del bronce dorado, lo que le añade un plus de luminosidad.
Escenas en las Puertas del Paraíso (Lorenzo Ghiberti) : 1. Adán y Eva 2. Caín y Abel 3.Noé4. Abraham 5. Isaac con Esaú y Jacob 6. José 7. Moisés 8. Josué 9. David 10. Salomón y la reina de Saba.
Las Artes eran corporaciones de profesionales, especie de gremios, y el Arte de Calimala reunía a los mercaderes dedicados a la exportación de la lana, tanto elaborada como materia prima, además de desarrollar labores bancarias.
Estas puertas desplazaron a las de Andrea Pisano  que ocuparon la puerta sur, pasando éstas a ocupar el lado este, la que está frente a la fachada del Duomo y para colocar la Puerta del Paraíso, tuvieron que cortar parte del muro, ya que la de Pisano era, mucho más pequeña.
El término “Puertas del Paraíso” según la tradición popular hace referencia al término con el que las nombró Miguel Ángel que se refirió a ellas con “Puertas del Paraíso”, por la belleza, el color y la luz que reflejaba, pero en realidad, fue por cuestiones litúrgicas, pues los neófitos entraban al baptisterio, acompañados por sus padrinos, por la puerta sur y, una vez bautizados, ya borrado el Pecado Original, salían del edificio por esta puerta este para acceder al Duomo, “Il Paradisium”, justo enfrente, ya como cristianos, y así poder llegar a la salvación. Y de ahí su nombre. Lo que si es cierto es que el mismo Ghiberti dijo que era "el trabajo más singular que jamás haya realizado".
La puerta del este, obra de Ghiberti, conocida como la  Puerta del Paraíso conmemora la salvación de Florencia de la peste que mató casi a la mitad de la población.
Puertas del Paraiso
El programa iconográfico fue elaborado por una comisión de sabios: humanistas, abades… con un papel muy decisivo en la elección de los motivos a representar.
Estas puertas tenían diez paneles o grandes recuadros y están dedicados al Antiguo Testamento en una lectura más lógica, esto es, de izquierda a derecha y de arriba abajo, y reflejan simultáneamente varios episodios de la historia de los personajes Adán y Eva con La creación de Adán, La creación de Eva, El pecado original y La expulsión del Paraíso, Caín y Abel con Los primeros padres delante de su choza, Abel cuidando el rebaño y Caín trabajando la tierra, Sacrificio de Caín y Abel, Caín mata a Abel, Dios padre pide cuentas a Caín, Noé con La salida del arca, El sacrificio de Noé y La embriaguez de Noé, Abraham con El encuentro de Abraham con los tres ángeles y El sacrificio de Isaac, Esaú y Jacob con Rebeca rezando a Dios, Rebeca dando a luz, Esaú vende su progenitura a Jacob, Isaac manda a Jacob de cacería, Jacob trae un cabritillo e Isaac bendice a Jacob, José con La venta de José a los mercaderes, El almacenamiento del grano, El descubrimiento de la copa de plata, y José se da a conocer a sus hermanos, Moisés con Moisés recibe las tablas de la ley y El pueblo aguardando a los pies del monte Sinaí, Josué con Los israelitas cruzando el río Jordán, Levantando el monumento de piedra y La conquista de Jericó, David con David mata a Goliat y La entrada en Jerusalén y Salomón y la reina de Saba con Salomón encuentra a la reina de Saba.
Adán y Eva
Estos paneles son rectángulos largos y no están incrustados en el tradicional rosetón gótico, como en las puertas anteriores. Ghiberti empleó los principios, recientemente descubiertos, de "perspectiva de profundidad" a sus composiciones, los bajorrelieves parece que se pierden en el fondo de los paneles y representando en cada panel más de un episodio como hemos visto y veremos más adelante, se pueden identificar más de 50 escenas. Por ejemplo En la "Historia de José" se retrata el esquema narrativo de José llevado por sus hermanos al pozo, José vendido a los mercaderes, Los mercaderes entregándole a José al Faraón, José interpretando el sueño del Faraón, El Faraón rindiéndole honores, José envía sus hijos a Egipto y José reconoce a sus hermanos y vuelve a casa.
Las figuras están distribuidas en bajorrelieve en un espacio de perspectiva (una técnica inventada por Donatello, la cual se llamó rilievo schiacciato, que literalmente significa "relieve aplanado"). El uso de la perspectiva es de gran importancia y típico de la nueva concepción del arte renacentista. Ghiberti utiliza diferentes técnicas esculturales, desde líneas fijas hasta figuras casi libres, con los paneles acentuando aún más el sentido del espacio.
Caín y Abel
Las jambas están decoradas con guirnaldas de hojas, flores y frutos entre los que destacan distintos animales con una posible función mágica o de homenaje a distintos personajes clásicos: langostas, ranas, grillos, lagartijas…
Los marcos de los paneles son dorados y lisos sin lóbulos ni puntas, es decir, han perdido el aspecto gótico de las otras puertas.
Cada hoja de la puerta contiene cinco escenas que aparecen enmarcadas por bandas horizontales en las que se alternan hornacinas aveneradas que contienen figuras de cuerpo entero y tondos con cabezas y bandas verticales con cápsulas que contienen figuras recostadas, postura adaptada al marco.
Se realizaron en el Nª1 de Via Bufalini, una placa señala el sitio del taller de Ghiberti
Los personajes representados de cuerpo entero, un total de veinticuatro, son Sibilas y Profetas, y en dos de las cabezas se han querido identificar, los retratos de Lorenzo Ghiberti, y su hijo Víctor.
Noé
Además, en el marco entre las historias de Isaac y de Moisés, está la firma del artista:
“LAUREИTII CIOИIS DE GHIBERTIS / MIRA ARTE FABRICATUM”.
Abraham
La gran calidad de su labor de fundición permitió que la obra permaneciera en ese lugar durante siglos sin necesidad de restauraciones. En el siglo XVIII se optó por oscurecer el dorado para adecuarlas al gusto neoclásico. En la II Guerra Mundial fue desmontada y escondida y tras la contienda fue sometida a una primera y agresiva restauración para eliminar la suciedad acumulada antes de su reubicación en el baptisterio. Pero las inundaciones que sufrió Florencia en 1966 arrancaron del marco seis de los diez paneles además de sacar a la luz el deterioro general de la obra provocado por la contaminación y la formación de óxidos, de ahí que se decidiera iniciar una profunda restauración de la obra que empezó por cuatro de los seis paneles arrancados y que continuó con una intervención integral que culminó en 2012 y que duró veintisiete años, casualmente los mismos que Ghiberti tardó en realizar la obra, decidiéndose dejar en el edificio una réplica moderna elaborada, también en bronce, en la década de 1990 para preservar la obra original en el Museo dell'Opera del Duomo, que tras su reciente reinauguración en octubre de 2015, después de una remodelación completa, expone las tres puertas originales del baptisterio en una sala ex profeso, preservadas en contenedores llenos de nitrógeno.
Detalle de Abraham 
sacrificando a Isaac
Una de las pocas copias hechas en la década de 1940 se encuentran instaladas en la Catedral Grace, en San Francisco.
El panel dedicado a Adán narra la Creación de Adán, la Creación de Eva, el Pecado Original y la Expulsión del Paraíso. Podemos pensar que Ghiberti pone demasiadas cosas, pero es cierto que todas ellas de una gran belleza y elegancia.
Destacando para él lo importante poniéndolo en un primer plano, como es el nacimiento de Adán y sobre todo el de  Eva, que ocupa el lugar central del panel, y con figuras casi de bulto redondo mientras que el hecho de la expulsión parece en segundo plano con un relieve muy aplastado, en un seudo efecto de perspectiva.
No se puede negar que Ghiberti ya maneja el bronce con gran maestría y es capaz de plasmar sin problemas las novedades instrumentales del renacimiento pleno.
Isaac con Esaú y Jacob
El panel dedicado a Abel muestra varios episodios, pero aparecen dispersos en el paisaje y resulta difícil secuenciación y lectura.
En el panel dedicado a Noé, destaca la imponente presencia de una gran pirámide para representar el arca.
José
En el panel de Abraham la escena principal es  la del Sacrificio de Isaac, ubicada en la esquina superior derecha. Hay un detalle curioso, este mismo tema sirvió de prueba para el concurso de la segunda puerta, que ganó Ghioto, en aquella ocasión en el momento anterior al propio sacrificio, casi diríamos de presentación de la ofrenda, pero en esta ocasión y a la manera de Brunelleschi representa al ángel deteniendo la mano de Abraham y con Isaac humillado con la cabeza baja en vez de la posición frontal con la que nos lo había presentado más de veinte años antes y con una actitud de este último mucho más realista, la propia de un muchacho a punto de ser asesinado por su propio padre. Signo de que los tiempos han cambiado y las tesis renacentistas se van imponiendo. De todos modos, Ghiberti sigue uniendo distintos episodios en la misma escena y aquí también relata el de la Hospitalidad de Mambré, con los tres ángeles como revelación de la Trinidad y la comida preparada por Sara que Abraham les ofrece como prefiguración de la Eucaristía.
Moisés
El panel de Jacob relata el Nacimiento de Esaú y Jacob, Esaú saliendo a cazar despedido por su padre Isaac, Rebeca y Jacob planeando el engaño con la piel de cordero e Isaac bendiciendo a Jacob, secuencias ambientadas en una arquitectura de arcos de medio punto en una proporción más alta que ancha y lejos de los cánones góticos, que además le permiten adoptar la sensación de perspectiva y escalar y adaptar el tamaño de las figuras referidas a contorno que les rodea, en una palabra ambientando las escenas.
La historia de José, hombre misericordioso que se sacrifica y después perdona, incluye a José arrojado al pozo por sus hermanos, José vendido a los comerciantes, José entregado al faraón, Interpretación de los sueños del faraón, El faraón honra a José, Jacob envía a sus hijos a comprar grano a Egipto y José reconoce a sus hermanos, los perdona y vuelve a casa de su padre.
Las escenas se desarrollan ante una arquitectura circular, cada vez lejos de la verticalidad gótica y cerca de la arquitectura centralizada propia del hacer renacentista.
Josué
Hay quienes afirman que este panel puede hacer referencia a la vuelta triunfante de Giovanni Medici, después de diez años de exilio, tras ser acusado de malversación y que supuso el inicio de la hegemonía de la familia Medici y el comienzo de un período de gran prosperidad para la ciudad.
El séptimo panel, dedicado a Moisés, muestra a Moisés recibiendo las tablas de la Ley de Dios en el monte Sinaí mientras a sus pies aparece el pueblo atemorizado por truenos y rayos.
En el de Josué, el octavo, contiene las escenas de Los israelitas cruzando el Jordán, La Erección de un monumento de piedra y la Caída de Jericó, con un gran cortejo y los muros de la ciudad al fondo en planos sucesivos que conceden gran profundidad a la escena, aunque todavía está lleno de detalles secundarios y es difícil identificar al personaje principal, encima del carro tirado por caballos a la izquierda.
En la escena de David, novena, se representa a David cortándole la cabeza a Goliat, en cierta forma refleja cómo la salvación humana depende de la intervención divina y lejos de las anteriores se centra en un motivo principal, destacando lo más importante de la historia que él quiere contar y unificando los elementos de la escena, entorno al eje principal.
David
La escena de Salomón, centrada exclusivamente en el encuentro de Salomón y la reina de Saba, es especialmente importante estilística y conceptualmente.  En cuanto al estilo decir que Igual que en los paneles de Jacob y José, predomina una arquitectura, en este caso con ciertos toques góticos, semejante a un arco de triunfo pero con gran profundidad y que acompañada de los edificios laterales proporcionan una impresionante perspectiva. Pero a diferencia de los anteriores, la composición tiene un claro centro geométrico en el que convergen las líneas y donde se ubican los protagonistas.
Salomón y la reina de Saba
Además, parece ser que el encuentro entre Salomón y la reina de Saba, como único tema tratado, corresponde a un intento de simbolizar, mediante el arte, la unión de la Iglesia de Oriente y la de Occidente, tema de especial preocupación en el Concilio de Basilea y que terminó con un acuerdo de reunificación en Florencia en 1439, aunque la unión fue transitoria y pronto el emperador Paleólogo la rompió.
Para concluir, en 1502 Andrea Sansovino, ejecutó el grupo escultórico del Bautismo de Cristo que corona la puerta, al que en 1792 Innocenzo Spinazzi añadió un ángel, en la actualidad expuesto en el Museo dell’Opera del Duomo. Las dos columnas de pórfido que flanquean la puerta fueron una donación de la ciudad de Pisa a la de Florencia en agradecimiento a la ayuda militar que recibieron en 1117 contra Lucca.
Interior
El interior del Baptisterio, que recuerda al Panteón de Agripa, es algo oscuro ya que la luz entra por pequeñas ventanas del deambulatorio y por medio de la lámpara central. Su interior es majestuoso y uno queda desarmado ante tanta belleza. Es imposible entrar sin fijar la mirada en los mosaicos de su cúpula, continuando con las incrustaciones del suelo, realizadas en mármol.
Su interior, como el exterior, se divide arquitectónicamente en 3 distintos niveles, todos ellos decorados con mosaicos y mármoles de distintos colores. 
La parte más baja con enormes columnas monolíticas corintias de granito y capitel dorado, dos por cada uno de los lados, que separan los nichos y pilastras del mismo material, granito, con capitel corintio, en cada intersección lateral, que soportan un dintel o cornisa y entre las que aparecen placas de mármoles blancos de Carrara y verdes de Prato.
En el piso  central, en una especie de deambulatorio o galería con ventanas divididas de arcos geminados de medio punto, el matronei o zona reservada a las mujeres y en el que podemos admirar hermosos mosaicos, con motivos geométricos y personajes bíblicos, muchos de ellos perdidos aunque se conservan otros con santos y ángeles datados en el primer tercio del siglo XIV, y los recuadros en el parapeto de la galería con bustos de profetas y patriarcas y en un friso en la base de la cúpula con bustos de santos, todos ellos identificados con inscripciones.
Y un tercer cuerpo formado por un zócalo  sobre el que se asienta  una cúpula de ocho cuerpos apoyada en los muros perimetrales, enmascarada exteriormente por el alzado de los muros sobre el arco del segundo nivel y por una pirámide de techo aplastado.
Los florentinos no repararon en gastos para el baptisterio. Las paredes interiores están revestidas de mármol blanco y negro distribuido en bandas con diseños geométricos y en el mismo estilo dicromático del exterior.
Decoración musivaria. Galeria
de las mujeres
Los nichos están separados por columnas monolíticas de granito. El revestimiento de mármol del interior se comenzó en la segunda mitad del siglo XI. El ábside rectangular fue revestido con mosaicos en 1225.
En su interior, en el muro de la epístola, el baptisterio contiene el espectacular monumento funerario parietal de corte renacentista que situado entre dos columnas corintias en mármol y bronce no rompe la armonía arquitectónica.
Está concebido como una serie de estructuras superpuestas, con friso en su base, continuada por las figuras de las tres Virtudes en nichos y las armas de la familia de Cossa, un sepulcro con inscripciones y efigie de bronce dorado yacente con la cara vuelta hacia el espectador que reposa sobre su lecho de muerte, sostenido sobre ménsulas que representan a leones y sobre él una Virgen y el Niño en media luneta , todo ello bajo un dosel  de cortinajes dorados con cierto efecto teatral. 
Nicho antipapa
Juan XXIII
Mª Magdalena
de Donatella
Fue diseñado por Donatello quien probablemente se encargó de tallar al yacente, mientras que Michelozzo realizaría la Virgen con el Niño del tímpano y las Virtudes teologales del friso inferior y corresponde al antipapa Juan XXIII, Baldassare Cossa, quien murió en Florencia en 1419.
Él mismo había donado muchas de sus reliquias y su gran fortuna a este baptisterio.
Este monumento se convirtió en modelo para otros monumentos funerarios florentinos.
En su interior también se encuentra un baldaquino, siendo uno de los primeros del Renacimiento.
En el baptisterio también estuvo la famosa talla de Donatello de la Magdalena penitente o un impresionante altar de plata con gemas preciosas, del 1367, oferta de la asociación de comerciantes florentinos. Un altar que se podía mover para colocarlo al centro del Baptisterio en ocasiones especiales, ambos en el Museo dell'Opera del Duomo.
El altar que pueden ver ahora, está ubicado frente a la famosa Puerta del Paraíso en una plataforma realizada por Leonardo Da Vinci, aunque es del siglo XX, con estilo neo-románico, construido a partir de fragmentos del original para sustituir a otro barroco hoy depositado en el Museo dell’Opera del Duomo. Constituye una de las zonas más «modernas» del complejo.
Junto al altar se aprecia un complejo candelabro pascual del XIV.
En el baptisterio también se conservan dos sarcófagos del período romano tardío, reutilizados para enterrar a personajes de renombre. Uno de ellos contiene una escena de caza de un jabalí y al que se le añadió el escudo de armas de la   familia Médici, mientras que el otro representa escenas de la vida romana.
Arco del ábside
Pero, la parte más impresionante, sin dudas, son los antiguos mosaicos de la bóveda y el ábside, que datan 1270, que fueron realizados por maestros venecianos ayudados por otros artistas locales según cartones de grandes pintores florentinos y  que están considerados obras maestras del gótico italiano.
Mosaicos del ábside
Los mosaicos más antiguos son los de la bóveda del ábside de planta rectangular con cubierta de medio cañón y que se abre al presbiterio mediante un doble arco de medio punto decorado con los bustos centrales de Cristo al exterior acompañado de motivos ornamentales, la Virgen en el intradós con un friso de los santos en los nichos  y un sorprendente San Juan Bautista flanqueado por medias figuras de apóstoles y profetas, en el arco interior.
Agnus Dei
rodeado de profetas
En la bóveda se representa el Agnus Dei en mandorla con la inscripción "HIC DEUS EST MAGNUS MITIS QUEM DENOTAT AGNUS", rodeado de los profetas de cuerpo entero Moisés, Abraham, Isaac, Jacob, Daniel, Ezequiel, Jeremías e Isaías, identificados con respectivas inscripciones a sus pies, y formando una rueda sustentada por cuatro telamones en cuclillas sobre los capiteles corintos, con San Juan Bautista (en el lado izquierdo) y la Virgen y el Niño (en el lado derecho), ambos entronizados.
Virgen y S.Juan entronizados escoltando
al Agnus Dei
Los mosaicos sobre fondo dorado que cubren el interior de la cúpula
se iniciaron cerca del 1270, bajo la dirección del fraile franciscano Jacopo da Torrita y con el patronato del Arte de Calimala, patrón del baptisterio y  probablemente no fue completado hasta el siglo XIV tardando casi un siglo en ser completados.
Rodeando la linterna hay una greca de grutescos con bustos y símbolos de los primeros cristianos, como ciervos, carneros, pavos reales, garzas…
A continuación los ocho segmentos nos muestran las Jerarquías Angelicales que según la Iglesia, desde el siglo V, el “cielo” era concebido como un mundo completamente jerarquizado con Dios en el centro y rodeado de las Jerarquías Angelicales que eran tres, con tres órdenes cada una, según la función designada por Dios y su cercanía a Dios o a los hombres: Primera Jerarquía:
Serafines, Querubines y Tronos. Los más cercanos a Dios.
La segunda Jerarquía:
Dominaciones, Virtudes y Potestades. Entre el cielo y la tierra.
Y la tercera Jerarquía:
Principados, Arcángeles y Ángeles. Más cerca del hombre
En el segmento central, sobre el ábside, aparece Cristo Pantocrátor, figura de 8 metros de altura, bendiciendo con una mano y en la otra un libro abierto y está flanqueado por dos Serafines y dos Querubines, que forman su corte celestial, están en contacto directo con Dios cantándole sus alabanzas. A su izquierda aparecen los Tronos, que son los encargados de transportar el trono de Dios al Cielo, sujetando con sus manos mandorlas de luz, símbolos del trono de Dios. Esos tres ángeles forman la primera jerarquía.
Distribución de los mosaicos
de la cúpula
Pero sigamos un orden que va a ser, en nuestro caso, las manecillas del reloj, a continuación de los Tronos encontramos a las Virtudes que son los encargados de administrar la gracia de Dios, por eso a  sus pies aparecen personajes a los que les están saliendo los demonios de sus bocas.
Seguimos con los Principados, que vigilan las naciones del mundo y que junto los Ángeles, que son los más cercanos al hombre, y atienden sus problemas y preocupaciones y los Arcángeles, vestidos con elegantes ropajes y con un rollo en la mano porque son asesores enviados desde el Cielo. Los tres forman la segunda jerarquía.
Cristo con Serafines y Querubines
Seguimos con las Dominaciones, que, en su caso, llevan un cetro rematado por un trébol como símbolo de la Trinidad, y que junto a las Virtudes, antes nombradas y a las Potestades, que aparecen vestidos con armadura porque son los encargados de distribuir el poder a la humanidad,  forman la tercera jerarquía.
A continuación se representa el Juicio Final que ocupa tres de los ocho segmentos encima del altar, con un gigante y majestuoso Cristo Resucitado y Juez centrado en mandorla circular y con los Ángeles del juicio a cada lado. Muestra las llagas de la Pasión en manos y pies, ligeramente desproporcionadas y lleva nimbo crucífero. Bajo Él, se sitúan los resucitados que serán juzgados en el Juicio Final.
Potestades

A ambos lados aparecen tres registros paralelos. En el superior se sitúan, los ángeles, los más cercanos a la Divinidad hacen sonar las trompetas anunciando el Juicio y los otros portan los símbolos de la Pasión: la cruz, la corona, el paño….
Juicio Final
En el registro central, sentados en sendos bancos corridos, aparecen la Virgen, a la derecha de Cristo, y San Juan Bautista, a la izquierda, formando la típica Deésis, están seguidos de los doce Apóstoles, seis a cada lado, que portan libros con escrituras en distintos alfabetos que recuerdan su obra de evangelización tras la venida del Espíritu Santo en Pentecostés. Tras los respaldos de los bancos asoman la cabeza unos ángeles que inclinan la cabeza, a derecha o a izquierda.
Pantocrátor
En el registro inferior se representan, a la derecha de Cristo, el Paraíso, y a la izquierda, el Infierno.
Paraiso, derecha de Cristo
Los elegidos, a la derecha, entre los que se reconoce a un rey, un fraile dominico, obispos, monjes con tonsura, vírgenes… son guiados por un ángel que sujeta una filacteria en la que se lee "Venite Beneditti Patris Mei / Ossidete Preparatum" para ser recibidos en el Cielo, la Jerusalén Celestial, por los patriarcas bíblicos, que sostienen las almas de los justos en sus regazos.
Otras escenas:
Visitación
Infierno, izquierda de Cristo
Al otro lado, los condenados son empujados por dos demonios y se amontonan unos encima de otros ante Satanás que sentado en un trono devora un hombre mientras unas serpientes que surgen de sus orejas devoran a otros y varios animales monstruosos arrojan a los pecadores al abismo, donde aparecen un hombre ahorcado, otros mutilados, quemados, golpeados…
Esta última parte es particularmente famosa. Son escenas que recuerdan, en cierto modo, los trabajos del Bosco en El Juicio Final o en El Jardín de las Delicias. Incluso a la obra de Dante Alighieri en el que puede haber una cierta influencia de estas imágenes de muerte y resurrección.
Satanás devorando condenados
Las demás escenas, de los cuatro registros (filas) de los otros cinco segmentos, representan diferentes historias en niveles horizontales desde el centro hacia el exterior del mosaico: dos historias del Antiguo Testamento: Libro del Génesis, historias del patriarca José, y otras dos del Nuevo Testamento historias de María y Cristo, y finalmente en el nivel más bajo: historias de San Juan Bautista, con las escenas separadas por columnas de variados fustes y capiteles.
Otras escenas.
matanza de los inocentes, Última cena y
 Beso de Judas
El pavimento, es una impresionante labor de intarsia o taracea de mármoles, donde materiales de diferentes colores parecen estar incrustados entre sí, encajando como un rompecabezas con motivos geométricos, vegetales y zoomorfos de inspiración oriental. El suelo de mosaico, hecho de teselas cuadradas, se comenzó en 1209. Los patrones geométricos en él son complejos.
Otras escenas:
Anunciación.Visitación y Natividad

Al lado de la puerta este, la decoración pavimental nos muestra un zodiaco circular donde se pueden ver todos los doce signos zodiacales y que hasta el siglo XIII estuvo en la puerta norte. Formaba un reloj de sol construido sobre la primera mitad del siglo XI y atribuido al arquitecto, escultor y astrónomo Strozzo Strozzi. Su posición ha cambiado en los siglos, así que, hoy en día, no puede observarse el fenómeno solar que determinaba. Había un orificio central en la cúpula, que también fue cerrado para incorporar una linterna, y los rayos que por él penetraban marcaban el signo correspondiente dependiendo del mes del año. Y en el mediodía solar del solsticio de verano, el 21 de junio, Cáncer, durante unos minutos un rayo iluminaba justo el centro del zodiaco.
Zodíaco del Baptisterio
Alrededor del sol central puede leerse el palíndromo (se puede leer al derecho y al revés) "en giro torte sol ciclos et rotor igne", dedicado al Sol, motor de nuestro universo.
Pavimento con Zodíaco
Había una fuente octogonal, rodeada de una valla octogonal, cuya base aún se ve claramente en el medio del piso. Esta fuente, que alguna vez estuvo en la iglesia de Santa Reparata, fue instalada aquí en 1128. Se dice que Dante había roto una de las cuencas inferiores mientras rescataba a un chico que iba a ahogarse. La pila bautismal actual, mucho más pequeña, se encuentra cerca de la entrada sur y fue realizada en 1371 en un solo bloque de mármol con seis bajorrelieves con escenas de bautismo, y es atribuida a la escuela de Andrea Pisano. La fuente fue quitada en 1571 bajo órdenes del gran duque de Toscana Francisco I de Medici. Y vuelta a instalar en 1658.
En febrero de 2023 se pusieron en marcha las primeras etapas de un impresionante proyecto de restauración que tendrá una duración total de 6 años. Los más de 1.000 metros cuadrados de mosaicos, realizados con 10 millones de teselas policromadas que van de los 5 a los 20 mm de lado, serán objeto de una intervención que pretende recuperar la estabilidad estructural y su adherencia a la bóveda, frenar los fenómenos de degradación y sacar a la luz el esplendor del fondo dorado y los vivos colores de las baldosas de cristal.
Obras de restauración de los
mosaicos de la cúpula